16 nov 2008

clarita (monologo)

voy caminando por esta callesita húmeda, en esta noche gris... que es gris aunque las estrellas titilen a lo lejos y la (entra a un bar donde están Sarita, su hermana, y Alfonso, su prometido) luna redonda me sonría... (a Sarita) ¿qué hace ahí, pebeta, hermana mía? ¿cómo está? Yo venía caminando por este Buenos Aires húmedo en busca de usted, la andaba buscando... ¿qué hace Alfonso, cómo anda? Yo también, estoy así como la vida... La vida es como una calesita en una esquina sombría, que llora al girar y hace sangrar las cosas que fueron rosas un día, ¿no, Alfonso? Sí, un wishky por favor... Me quedé pensando en la calesita... porque yo una vez conocí la felicidad, ¿saben? (se prende un cigarrillo) Sí, conocí la felicidad, entre tanto mundo gris yo pude pispiar un rosa... (entran unos mariachis y Alfonso le canta una serenata, ella ofendida porque no es un tango le pega una cachetada) ¡Me cacho en diez! ¿que le pasó Alfonso? Usted la pifió fulero... ¿no se da cuenta? ¡yo soy tango!... no se da cuenta Alfonso, yo nací siendo tango y moriré igual, por eso ¡viva el tango y viva yo! Y... se lo tengo que decir Alfonso... no le puedo permitir esta paparruchada Alfonso... Alfonso usted ya fue... no va más... se finí... Discúlpeme Alfonso, pero la vida es así... Yo se que un amor que se nos marcha es un amor que al final nos lleva la vida... pero usted ya se va a reponer ¿no, Alfonso? Sabe qué, me acuerdo de nuestro barrio... barrio de tango, luna y misterio, calles lejanas, ¿cómo estarán? Yo era el orgullo del barrio entero...¿se acuerda Alfonso? Alfonso, no se ponga mal... ¿Se acuerda?... yo me arrimaba a la ventanita, llena de flores, de infancia, de magia, y ahí estaba usted siempre, esperándome... las callesitas mojada de humeda´... Me gusta la humeda´... me gusta el agua, las noches grises, ¡el tango! ¡porque el tango me abre en flor el corazón! es la danza que me enseñó a amar... ¿se acuerda Alfonso? yo se que sí (lo mira) ¿verdad? Y esta noche estoy de tangos, y por eso les vengo a decir a usted Alfonso y a usted Sarita, purreta hermana mía, que me voy, me voy para no volver... Sí... Si la viejita nos viera, que orgullosa estaría... la viejita antes de irse, me dijo "cuidala a Sarita" y mirá como estás, grande, hecha una pebeta... ay! la viejita y sus mates cocidos!... y esos ojos que brillaban como el sol... Y ahora sí, me voy... pero no se pongan tristes... porque la vida es así... La vida es un recuerdo, y volviendo a su pasado se acordarán de mí, escondiendo en sus sonrisas muchas ganas de llorar... Pero yo soy tango, viento... y como el viento me voy... Y si me quieren encontrar voy a estar a la vuelta de la esquina, bajo la luz de la luna o si no abajo de algún farol, a la espera de algún chabón o de algún tango que me haga olvidar las penas del corazón. Chau Alfonso. Chau Sarita. (sale) Me voy, vuelvo a esta noche gris con olor a viejo, a vida, mi vida se podría cantar en un tango, porque yo soy tango, soy viento, agua, luna y estrellas cansadas de brillar

calrita